"La Alta Comisionada de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet, se suma al justo, humano y urgente clamor mundial, al considerar que: 'en este momento decisivo, las sanciones sectoriales deberían atenuarse o suspenderse...'", señaló el canciller en la red social Twitter.
Este 24 de marzo Bachelet dijo que las sanciones deberían ser objeto de reevaluación urgente, por su posible repercusión negativa en el sector de la salud y los derechos humanos.
"Es fundamental que se evite el colapso de los sistemas sanitarios nacionales, habida cuenta de la explosiva repercusión que eso podría tener en términos de muerte, sufrimiento y ampliación del contagio (…) En un contexto de pandemia mundial, las medidas que obstaculizan la atención médica en cualquier país incrementan el riesgo que todos afrontamos", indicó la alta comisionada en un comunicado emitido por su oficina.
Con respecto a Venezuela, Bachelet reconoció que la atenuación de las sanciones "permitiría una mayor asignación de recursos para tratar y prevenir la epidemia".
El pasado 22 de marzo, el presidente Nicolás Maduro condenó que EEUU amenace a los laboratorios internacionales para que no le vendan a Venezuela medicamentos y las pruebas para la detección del COVID-19.
El Ejecutivo venezolano elevó a 84 el número de personas contagiadas por el nuevo coronavirus en el país caribeño.
Adicionalmente, Maduro ordenó a partir de este 24 de marzo la radicalización de la cuarentena en la región capital, integrada por: Distrito Capital (norte), y los estados Miranda y la Guaira (norte), donde se concentra el 77% de los casos de contagios de COVID-19.