Trump declaró la emergencia nacional debido a la rápida propagación del coronavirus y se refirió a las medidas de sentido común que cualquier estadounidense debe seguir para no contagiarse de COVID-19.
"Quiero alentar a todos a seguir las medidas que hemos anunciado y estas son de sentido común", dijo el presidente de EEUU.
No obstante, se le olvidó que evitar apretones de mano también forma parte de las medidas para prevenir el contagio de la enfermedad causada por el nuevo coronavirus, y extendió su mano a cada uno de los funcionarios que presentaba en el evento.
Solo Bruce Greenstein, vicepresidente ejecutivo del grupo LHC, le dijo que no a Trump y le respondió con el codo.
"Me gusta. Eso es bueno", reaccionó el presidente de EEUU.
EEUU tiene más de 2.000 casos confirmados en todo el país y más de 50 muertos.
El 11 de marzo, la Organización Mundial de la Salud declaró la propagación de COVID-19 como una pandemia.
A nivel global, el patógeno ya infectó a más de 140.000 personas, provocando más de 5.000 muertes, según los últimos datos de la OMS.