"Denunciamos ante el pueblo boliviano y la comunidad internacional que la dictadura ha instruido la detención del delegado político del MAS ante el Tribunal Supremo Electoral de Bolivia y mi apoderado, Wilfredo Chávez", señaló el exmandatario en las redes sociales.
El exjefe de Estado, exiliado en Buenos Aires, añadió que "es un atropello sin nombre que quiere proscribirnos".
La detención de Chávez, que todavía no ha sido confirmada en La Paz, se habría producido a pocas horas del cierre del registro de candidatos en ese tribunal.
El 2 de febrero Morales sostuvo que la detención de Hermosa se llevó a cabo "sin ninguna prueba ni fundamento jurídico".
El expresidente también señaló que denunciará ante la fiscalía y ante "instancias internacionales la sustracción de mis documentos, la desaparición del Poder Notarial y mi libreta del Servicio Militar, que obtuve dignamente en 1978".
"Quieren amedrentarnos, pero no lo lograrán", apostilló.
La caída de Morales por un golpe de Estado el pasado 10 de noviembre dio lugar a la autoproclamación del Gobierno transitorio de Jeanine Áñez, sin aval parlamentario inicial.
Desde el 22 de enero, cuando concluyó el período presidencial quinquenal que no pudo culminar Morales, Áñez gobierna gracias a una ley de ampliación excepcional de mandato hasta la instalación del Gobierno que surja de las venideras elecciones.