"El Líbano es un Estado importante, la estabilidad económica y financiera [del Líbano] es importante para los países del Golfo Pérsico (...) Catar asumirá compromisos en apoyar al Líbano", dijo el ministro.
Emadi señaló que Catar ya "ha ayudado a varios Estados del Oriente Medio, y hoy en día el Líbano está experimentando dificultades económicas".
Las protestas comenzaron en el Líbano el 17 de octubre y continúan pese a la dimisión del Gobierno.
Los manifestantes siguen ejerciendo presión sobre los dirigentes del país, exigiendo formar un nuevo Gabinete de ministros y efectuar eficaces reformas políticas y económicas.
Se suspendió la transferencia de dinero a cuentas bancarias extranjeras, se limitó hasta mil dólares por semana la posibilidad de retirar dinero de la cuenta bancaria de la persona.
Muchas empresas privadas, incluidas tiendas y farmacias, se niegan a efectuar operaciones de pago con tarjetas bancarias y piden dinero en efectivo.