Los expertos indicaron que el sismo se produjo a cinco kilómetros al norte de Estrasburgo, ciudad donde se sintieron temblores leves, y a una profundidad de diez kilómetros.
El 11 de noviembre cerca del municipio de Montélimar, en el sureste de Francia, tuvo lugar otro terremoto, de magnitud 5,4.
Según los medios, los temblores se sintieron entonces en varias ciudades francesas, entre ellas Lyon, Montpellier y Marsella.
Ese sismo dejó un herido grave en Montélimar, en el departamento de Drôme.
Además, en Ardèche al menos tres personas sufrieron heridas leves, según indicó en su cuenta de Twitter la prefectura de ese departamento francés.
Varias decenas de edificios ubicados en la zona presentan grietas, fisuras, derrumbes y otro tipo de daños.