"Estamos en el umbral de la aprobación final de este tratado en los espacios restantes de Norteamérica", luego de que el Senado de México lo ratificó, el 19 de junio pasado, afirmó Seade.
El T-MEC reemplazará al Tratado de Libre Comercio para América del Norte, vigente desde hace 25 años.
El avance en el Congreso de EEUU se logró después de una carta dirigida a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, entregada por López Obrador, el 8 de octubre pasado, a una delegación de congresistas encabezada por Richard Neal, presidente del decisivo Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara baja.
"Tengo noticias de primera mano de la forma excelente en que la visita de congresistas y la carta del presidente López Obrador disiparon las dudas sobre el contenido y cumplimento de la reforma laboral" en México, anunció Seade sin mencionar detalles.
La reforma laboral mexicana para elevar salarios y garantizar libertad sindical es una de las principales condiciones de parte del opositor Partido Demócrata, que controla la Cámara Baja estadounidense, para ratificar el T-MEC.
El proceso podría abreviarse en EEUU "a un par de semanas", y junto con la reciente victoria del Partido Liberal del primer ministro canadiense Justin Trudeau, "lo aprobarán con mayor facilidad" en Canadá, confió el alto funcionario.
La ruta de la ratificación
Una vez culminado el proceso en los poderes legislativos de los socios norteamericanos, "a partir de la última notificación de ratificación, en tres meses más entrará en vigor el tratado" de comercio libre, detalló el negociador.
"Lo que importa es la señal que se envíe a los inversionistas de que hay tratado, está a punto de turrón", expresó el vicecanciller, quien fue nominado por López Obrador para las negociaciones desde su triunfo electoral en julio de 2018.
Añadió que tiene "confianza que antes del receso de invierno [boreal] del Congreso de EEUU se lance el proceso, cuando la señora Nancy Pelosi decida llevarlo a votación en el Comité de Medios y Procedimientos".
López Obrador dijo este 25 de octubre que T-MEC va a ayudar, "es algo bueno, tanto para EEUU como para México, se trata de fortalecer la integración económica entre los tres países".
"En el caso nuestro, es un elemento importante para lograr que haya desarrollo en México, no solo crecimiento, es parte de nuestra estratega de impulsar la economía para crear empleo y bienestar", puntualizó.
López Obrador ha recordado en varias ocasiones que siendo opositor se opuso al TLCAN, que entró en vigor en 1994.
Indicó que por eso comprende a los legisladores opositores demócratas de EEUU, sobre todo sindicalistas, que se oponen a ratificarlo.