"Mi respuesta al canciller Diego Pary, Secretaría General de la OEA acepta realizar análisis para verificar integridad del proceso electoral en Bolivia", publicó Almagro en la red social Twitter.
El Gobierno de Bolivia pidió el 22 de octubre a la comunidad internacional y a la oposición que, si lo consideran necesario, verifiquen acta por acta los resultados oficiales de las elecciones del 20 de octubre.
El canciller Pary afirmó que Bolivia entregó a la Secretaría General de la OEA en Washington una solicitud de que lleve a cabo una auditoría al proceso electoral, incluida una verificación de todas las actas, a la brevedad posible.
El vicepresidente del TSE, Antonio Costas, renunció con carácter irrevocable a ese organismo expresando su desacuerdo con una polémica suspensión de la transmisión de los cómputos preliminares de las elecciones.
En la nota, dirigida al vicepresidente Álvaro García, Costas —considerado el más calificado vocal electoral por su pasada gestión como presidente del TSE— dijo que no participó en esa decisión tomada horas después de la votación general y que desató protestas y denuncias de fraude desde la oposición política.
El candidato opositor y expresidente Carlos Mesa (2003-2005), quien daba por seguro que accedería a un balotaje con Morales, denunció la suspensión temporal del sistema TREP como prueba de un supuesto fraude, por lo que llamó a la "resistencia democrática" contra los resultados oficiales de los comicios.
El conteo oficial había superado el 22 de octubre de tarde el 93% de actas nacionales computadas y daba al presidente Evo Morales una ventaja aún insuficiente para evitar una segunda vuelta con Mesa.