Los medios de Noruega informaron con anterioridad sobre la presencia de fuerzas especiales supuestamente rusas en el territorio del país.
Denunció que se trata de un "apogeo de falta de principios y alejamiento no solo de la ética profesional, sino de las normas profesionales del periodismo".
"Estamos conmocionados por esta extraña actividad informativa del lobby rusófobo", resumió.
Moscú constata, añadió Zajárova, que "últimamente en Noruega se realiza un trabajo sistemático para imponer la imagen de Rusia como un enemigo; es una política agresiva de información antirrusa".
La diplomática expresó la esperanza de que Noruega construya las relaciones con Rusia "basándose en los intereses a largo plazo y el respeto de socios, y no en unas provocadoras noticias falsas".