"Comenzamos la precampaña con un escenario de precios y de contexto político en Argentina que cambió rotundamente a partir de agosto. Los precios eran muy favorables para el maíz, que es lo primero que se siembra, y pensábamos en expansiones [de superficie] del 7%", dijo a Sputnik Agustín Tejeda, economista jefe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Tejeda explicó que las previsiones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos superaron las expectativas, lo que provocó una caída en los precios internacionales del maíz, por lo que finalmente se espera un aumento en el espacio sembrado de tan solo 1% en Argentina, que de todas formas será récord histórico con 6,4 millones de hectáreas para este grano.
Este vuelco tiene un efecto de reacción en cadena porque impacta en la rotación durante la campaña ya que la producción de soja en primera instancia limita la producción de cualquier otro grano o cereal en la segunda cosecha. En ese contexto es difícil que se alcancen volúmenes totales como los de la temporada pasada, que registró un récord histórico con 147 millones de toneladas. Ahora se espera un total de poco más de 131 millones de toneladas.
Previsiones precavidas
Argentina es uno de los principales países exportadores de soja en forma de granos, aceite y harina, con el complejo agroexportador más grande del mundo ubicado en los puertos de Rosario. Su principal comprador es China, el mayor consumidor de este commodity del mundo, país que mantiene una tensa guerra comercial con EEUU.
Además, ante el probable cambio de Gobierno a partir de diciembre, los productores temen por la modificación de las "reglas de juego", es decir, la posibilidad del retorno de restricciones que fueron eliminadas durante la gestión del presidente argentino, Mauricio Macri, y del aumento de aranceles.
"Argentina tiene una política de alícuotas para los cultivos; para el trigo y el maíz están alrededor del 7% y, en el caso de la soja, alrededor del 25% de derechos de exportación. Veníamos pensando en un escenario que no fue el que se dio en las [elecciones] primarias, entonces comienzan a haber muchos interrogantes respecto de lo que pudiera hacer el próximo Gobierno", detalló Tejeda.
La Bolsa de Cereales también anticipa subas en los costos de insumos de por lo menos 5% y "una caída dramática de los márgenes brutos de ganancias" de aproximadamente 10% para los productores.
La incertidumbre también es climática
Finalmente, están los miedos sobre el clima, dos años después de la peor sequía en décadas, que causó estragos en la producción. Eduardo Sierra, asesor climático de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, realizó un pronóstico de lo que se espera en el aspecto meteorológico para los próximos meses en el marco de la presentación de la Campaña 2019-2020.
El experto explicó que no hay un consenso entre los principales analistas del mundo: mientras la agencia espacial estadounidense NASA pronostica frío y sequedad, la agencia atmosférica y oceánica norteamericana NOAA coincide con otros organismos de opinión contraria, que anticipan lluvias y humedad para el período.