"Fue un discurso bastante objetivo y contundente, no fue agresivo; yo estaba buscando restablecer la verdad de las cuestiones de las que estamos siendo acusados en Brasil", afirmó Bolsonaro al salir del hotel en el que está hospedado en Nueva York, según recoge el diario Folha de Sao Paulo.
"No cité el nombre de Macron ni el de Angela Merkel, cité Francia y Alemania como países que tienen más del 50%o de su territorio dedicado a la agricultura; en Brasil es apenas el ocho por ciento", añadió.
Horas antes, Bolsonaro criticaba en la sede de la ONU durante el 74 período de sesiones de la Asamblea General el espíritu colonialista de algunos países por sus acusaciones al Gobierno brasileño y a su gestión en el combate a los incendios que ocurren en la Amazonía.
El primer discurso de Bolsonaro en la ONU estuvo rodeado de fuertes expectativas, y los analistas habían pronosticado un tono más conciliador, confiando en que el presidente brasileño aprovecharía la ocasión para explicar mejor su postura sobre la Amazonía y limar asperezas con líderes mundiales.