"La gran ventaja que tuvo Bolivia es que tiene un presidente muy preocupado por Bolivia y por los bolivianos, y eso hace la diferencia (...), yo espero que Bolivia siga votando bien", dijo Fernández tras su encuentro de la noche del 19 de septiembre con Morales, donde inició una gira que incluiría también una visita al presidente peruano Martín Vizcarra, en Lima.
Fernández, cuya declaración fue divulgada por el servicio de prensa de la presidencia boliviana, se refería a las elecciones generales que se realizarán el 20 de octubre en Bolivia, en las que Morales buscará un cuarto mandato consecutivo sin precedentes.
Morales, por su parte, llamó "hermano" a Fernández en un mensaje en su cuenta de la red social Twitter en el que aseguró que su trabajo conjunto "siempre estará del lado de la integración y del bienestar de nuestros pueblos".
El candidato opositor argentino, que tiene como compañera de fórmula a la expresidenta Cristina Fernández (2007-2015) y es considerado favorito para ganar las elecciones del 27 de octubre, dijo que su país puede tardar mucho tiempo en recuperarse de los daños causados por la política neoliberal.
"Lo que yo quisiera es que todos miren lo que nos pasó a los argentinos porque estos gobiernos [neoliberales] por ahí gobiernan solo cuatro años, pero hacen un daño que dura mucho tiempo y que cuesta mucho remontarlo", afirmó.
Morales dijo en la red social que son "hermanos latinoamericanos y trabajamos por la integración de nuestros pueblos".
El presidente izquierdista boliviano acostumbra referirse con frecuencia a la crisis económica argentina en discursos en los que advierte contra el retorno de gobiernos neoliberales a Bolivia.