"Las acciones inconsistentes y controvertidas de EEUU en Idlib no pueden causar nada más que desconcierto y preocupación", dice el comunicado.
Por un lado, Washington "despierta pasiones en relación con el sufrimiento de la población civil" en Idlib, por otro lado, "lanza un ataque aéreo que resulta en destrucción a gran escala y víctimas", expresó el Ministerio en su comunicado.
Ni Rusia ni Turquía, cuyos especialistas militares se encuentran en la zona, fueron avisados de la ofensiva planificada por EEUU, que según el centro ruso para la reconciliación de Siria, violó el alto el fuego unilateral decretado el 31 de agosto por parte de las fuerzas gubernamentales sirias.
Agregó que entre las víctimas hay menores, según testigos.
El Ministerio expresó las esperanza de que los empleados humanitarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que prestan asistencia sobre el terreno, a la hora de elaborar sus informes tengan en cuenta las acciones cometidas por EEUU en Idlib e "informen de inmediato a los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU sobre las consecuencias para los civiles y las infraestructuras".
El 31 de agosto a las 12.00 GMT dos aviones de la Fuerza Aérea de EEUU realizaron un ataque a un área entre las localidades de Maarrat Misrin y Kafr Haya, unas nueve horas después de que el Ejército de Siria declarara un alto el fuego unilateral en toda la zona de distensión de Idlib.
El Ejército de Siria, a pesar de que el ataque estadounidense provocó fuego por parte de grupos armados, afirmó que mantiene la moratoria sobre las hostilidades en aras de una pronta normalización de la situación en Idlib.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto en el que las fuerzas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas.
En la provincia de Idlib, desde 2015 hay más de una docena de diferentes grupos armados, los mayores de ellos son la alianza de grupos rebeldes proturcos del Frente de Liberación Nacional y el grupo terrorista Frente al Nusra, prohibido en Rusia.