"El Gobierno argentino extendió unilateralmente los vencimientos de todos los papeles a corto plazo. Bajo nuestro criterio esto constituye un incumplimiento de deuda, y estamos bajando la calificación crediticia de moneda local y extranjera a "default selectivo" y de los bonos a corto plazo a "D", explicó S&P en un comunicado en su página web.
En medio de una incertidumbre generada tras las elecciones primarias del 11 de agosto en Argentina, el Gobierno de Mauricio Macri anunció el 28 de agosto que la administración pretendía diferir el pago del crédito que mantiene con el Fondo Monetario Internacional (FMI), extender los vencimientos de la deuda de corto plazo, postergar los plazos de pago de los títulos bajo jurisdicción extranjera e impulsar una ley para prolongar también los bonos bajo ley nacional.
La vulnerabilidad del perfil crediticio argentino se deriva de un entorno financiero que se ha deteriorado rápidamente, la ausencia de confianza en los mercados financieros sobre iniciativas políticas bajo el próximo Gobierno y la imposibilidad del Tesoro de colocar deuda a corto plazo con el sector privado, dijo S&P.
La agencia agregó que prevé cambiar la calificación de la deuda a largo plazo a "CCC-" y la de corto plazo a "C" el 30 de agosto, pero que esa nota refleja mayores riesgos de otra baja mientras el Gobierno argentino busca la aprobación del Congreso para extender los vencimientos.
Macri lidia en estos momentos con una baja credibilidad desde que perdió por más de 15 puntos en las elecciones primarias del pasado 11 de agosto ante el peronista Alberto Fernández, que aspira a ganar los comicios generales del próximo 27 de octubre acompañado de la exmandataria Cristina Fernández de Kirchner en la fórmula presidencial.