"Se dijo que nos vimos solos en lo que se refiere a aplicar las sanciones contra Rusia, pero en realidad siempre estuvimos en el mismo lado que nuestros socios", señaló.
El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, formuló en vísperas de la cumbre de junio de la UE la posición de Roma en materia de sanciones antirrusas.
Las relaciones entre Rusia y Occidente empeoraron a raíz de la situación en Ucrania y la reincorporación de Crimea a Rusia tras el referéndum celebrado en marzo de 2014, en el que más del 96% de los votantes avaló esta opción.
Rusia subrayó en reiteradas ocasiones que no es parte del conflicto en Ucrania, y que la reincorporación de Crimea se había llevado a cabo respetando la legislación internacional y la Carta de la ONU.
Occidente impuso sanciones contra Rusia, el Kremlin a su vez respondió sustituyendo los productos importados por productos nacionales y declaró que comunicarse con Rusia en un lenguaje de sanciones es inútil.
Últimamente en los países de la Unión Europea se expresa con frecuencia la opinión de que las sanciones antirrusas son contraproducentes y hay que levantarlas.