En el primer semestre de 2019 las exportaciones representaron 232.179 millones de dólares, mientras que en el mismo periodo de 2018 las "ventas al exterior tuvieron un valor de 222.779 millones de dólares", indicó el Inegi.
En el sexto mes del año, las exportaciones totales aumentaron 3,8% en comparación anual, mientras que las importaciones se contrajeron 4,7%.
Sin embargo, las exportaciones petroleras se derrumbaron 19,3% a tasa anual, y las ventas de minerales y productos de extracción cayeron 6% en junio.
El índice de valor de la exportación de manufacturas ha mantenido su dinamismo, a pesar de las presiones comerciales del presidente de EEUU, Donald Trump, que amenaza con imponer aranceles si México no satisface sus exigencias de contención de la migración de indocumentados.
Sin embargo, la industria petrolera mexicana continúa su declive sostenido año tras año desde su pico histórico de producción de 2004.
Las exportaciones petroleras acentuaron su caída a 19,3% a tasa anual, las ventas de minerales y otros productos de extracción se redujeron en 6,0% en el sexto mes del año.
El dinamismo de las exportaciones se sostiene por la recuperación de las manufacturas, sobre todo las automotrices, agropecuarias y agroindustriales.
El rubro que presentó el mejor resultado fue el de exportaciones agropecuarias, que aumentaron 9,3%, comparados con junio de 2018.
México se colocó como el primer socio comercial de EEUU en el primer semestre del 2019, beneficiado por la guerra comercial de la potencia vecina con China.
Con ese resultado, la segunda economía latinoamericana superó a Canadá en la lista de socios de EEUU, que comerció con su vecino de sur 306.697 millones de dólares, mientras que la potencia asiática se rezagó con 271.044 millones de dólares.
La actividad comercial de Norteamérica absorbe más del 80% del comercio mexicano, representa la tercera parte del producto interno bruto del país latinoamericano, lo que compensa la debilidad de actividad industrial y la contracción de la inversión en la primera mitad del año.
La economía mexicana atraviesa una fase de "estancamiento", según reconocen las autoridades financieras, de modo que el resultado del sector exportación es un aliento ante la adversidad.