México pertenece a una categoría exclusiva en el mundo, integra el grupo de los 17 países más megadiversos del planeta junto a Colombia, Ecuador, Perú, Brasil, Congo, Madagascar, China, India, Malasia, Indonesia, Australia, Papúa Nueva Guinea, Sudáfrica, EEUU, Filipinas y Venezuela. En este puñado de naciones se encierra la clave de salvación de los demás, amenazados por la pérdida de especies denunciada por los científicos.
"Esto nos pone en una posición importante para impulsar una agenda de conservación, somos un reservorio para el planeta", dijo a Sputnik María José Villanueva, directora de Conservación de Fondo Mundial para la Naturaleza México (WWF, por sus siglas en inglés).
Sin embargo, hoy todas estas regiones están amenazadas. La Selva Maya y la Selva Lacandona, los segundos bosques tropicales más grandes del continente americano después del Amazonas, sufren transformaciones "muy importantes" desde los años 70, cuando empezó una conquista territorial hacia el sur este del país con "enormes impactos" en el suelo.
"A la fecha perdimos 70% de la Selva Lacandona y la Maya están siendo afectadas por la industria agrícola ganadera. Son sitios que concentran grandes cantidades de especies autóctonas y una de los santuarios más importantes de jaguares a nivel mundial", explicó Villanueva.
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Otros estados con gran valor ecosistémico son Chiapas y Oaxaca, ya que tienen bosques de pinos, selvas y ecosistemas marinos diversos. "Son regiones en franco deterioro por el cambio de uso del suelo que es la principal palanca de pérdida de biodiversidad".
Otra de las reliquias naturales mexicanas son los pastizales al norte de Chihuahua, hogar de bisontes, hurones de patas negras, un tipo de antílope americano conocido como berrendo, pumas y aves de pastizal que vienen desde Canadá y EEUU a pasar el invierno. Sin embargo de este ecosistema se perdió cerca del 80% por actividades ganaderas y mineras.
Por su parte, los desiertos distribuidos en gran parte del territorio albergan una gran variedad de especies de cactáceas, muchas en peligro de extinción.
"Aquí se originó este tipo de plantas y tenemos especies únicas en el mundo. Son zonas que sufren la presión de la ganadería de cabras, que arrasan con todo. Una sola puede acabar con una especie microendémica en un solo día", explicó.
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A pesar de haber perdido alrededor de un 30% de sus manglares por causas relacionadas a la contaminación, el cambio de uso de suelo para el desarrollo turistico/urbano y el cambio climático, México sigue siendo uno de los países con mayor cobertura de este bioma en el mundo.
"Estos ecosistemas son importantes para muchas especies de peces, ya que los utilizan para desovar y luego las crías los utilizan como guarderías. También sirven como barreras para los huracanes", señaló Villanueva.
Hacia los años 70, México fue el primer país del mundo en decretar santuario de ballenas y delfines en todas sus aguas: sus ecosistemas pelágicos albergan grandes cantidades de mamíferos marinos.
En este escenario tan rico en recursos naturales como en riesgos de conservación, Villanueva elaboró una lista de cinco organismos clave para mantener el equilibrio natural de un país que es uno de los balancines más importantes de ecosistema global:
Insectos polinizadores
"Son la base de múltiples alimentos que consumimos todos los días. Si llegaran a desaparecer podríamos sufrir impactos incalculables", indicó.
Murciélagos polinizadores
"Son pocos conocidos y algunos están en categoría de riesgo. El público confunde al murciélago con el vampiro chupa sangre y por eso los matan, pero son animales que controlan plagas. Son la base de la polinización para la industria tequilera y mezcalera. Si llegaran a desaparecer, el boom económico que sostiene a muchísimas familias se vería comprometido", sostuvo.
Corales y manglares
"Tienen un alto valor en cuanto a protección contra huracanes. De no contar con estas barreras naturales habría costos humanos y económicos incalculables cada vez que azota uno de estos vientos. Perder los manglares también sería un gran golpe para la industria pesquera. La pérdida de corales amenazaría a gran parte de la industria del turismo caribeño", aseguró.
Los perritos de la pradera
"Son arquitectos del subsuelo y dan aireación a la tierra. Los matan como si fueran ratas, mucha de la pérdida de biodiversidad que tenemos es por ignorancia", agregó.
Cobertura forestal
"Si seguimos perdiendo estos espacios vamos a ver colapsos importantes. La contingencia ambiental que vimos estas semanas en la Ciudad de México son producto de que los ecosistemas no están pudiendo regular los contaminantes de la atmósfera. Mientras la política de urbanización no involucre áreas verdes nos vamos a enfrentar a problemas serios", dijo.
Para Villanueva, las amenazas más grandes al ecosistema mexicano son la industria ganadera, la minería, la deforestación, el crecimiento de la mancha urbana, la contaminación por plásticos y vertimientos.
"El cambio climático exacerba todas las anteriores y las vuelve algo incontrolable", señaló la vocera de WWF.
Otro gran problema que azota los ecosistemas del país latinoamericano son las especies invasoras. En el Caribe el pez león, que viene del sureste asiático y es un depredador carnívoro sin rivales naturales en la zona, está atacando especies autóctonas como el mero, que por esta situación está en "grave riesgo".
"Está rompiendo los balances naturales de nuestros mares. La amenaza comenzó en Florida [EEUU] y ahora llegó hasta Belice. Este tipo de fenómenos es muy difícil de erradicar", aseguró.
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Para la conservacionista, el cambio climático es el "reto más grande que enfrenta la humanidad", y México, un territorio que aún conserva grandes cantidades de ecosistemas naturales, "tiene la gran oportunidad de aportar a una solución" para que el planeta pueda revertir esta "tendencia tan terrible".
"Es clave aportar una visión integrada a cuestiones de sustentabilidad para aportar al desarrollo propio y del planeta. La naturaleza es nuestra carta más fuerte", concluyó.