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¿Cómo comenzó el fenómeno de Cuba y qué futuro tiene?

El 5 de abril de 1956 Fidel Castro declaró contra el dictador Fulgencio Batista una guerra de tres años que más tarde acabaría con la victoria de la revolución. Dos politólogos hablan sobre el nacimiento y el futuro del 'fenómeno de Cuba'.
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El factor cubano

Una de las razones principales del por qué este país caribeño sigue el curso entablado por Fidel Castro es su pueblo, comenta a Sputnik el experto del Instituto Ruso de Estudios Estratégicos, Ígor Psheníchnikov.

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De acuerdo con él, el amor por la vida y por la patria se expresa incluso en las canciones revolucionarias, que nacieron en los años 50 y se convirtieron en una parte de la cultura cubana.

También está el 'antiamericanismo' innato, gracias al cual Cuba logra oponerse a la hegemonía de EEUU estando justo a su lado y bajo una amenaza constante. En gran medida, esto es posible gracias a la capacidad combativa de los cubanos.

"Los cubanos saben combatir, tienen un Ejército brillante. (…) Claro está, hay que recordar que hubo un tiempo en el que allí hubo instructores soviéticos. Y los cubanos son unos alumnos increíbles. Creo que en muchos aspectos incluso superaron a sus maestros", dijo Psheníchnikov.  

El fenómeno de Cuba

Una de las cosas más destacables de la Revolución cubana es el carisma de los líderes, de la familia Castro, que sigue existiendo después de tanto tiempo, afirmó a Sputnik el politólogo ruso, Borís Mezhúyev. 

"Es un factor sorprendente: a pesar de que tales Gobiernos pueden existir durante mucho tiempo, al final se enfrentan a una crisis muy fuerte, que normalmente se debe a problemas y dificultades internas", explicó.

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No obstante, en el caso de Cuba este Gobierno sigue viviendo de una manera estable, lo cual, según la opinión de Mezhúyev, es muy interesante. Lo que lo hace más interesante aún es que perduró después de la caída de "la Unión Soviética, su patrón geopolítico".

Por su parte, Psheníchnikov opina que la revolución cubana no fue socialista, sino ante todo antiamericanista, y eso sigue dando sus frutos incluso varias décadas más tarde.

"Incluso hoy en día los cubanos no quieren ser como los estadounidenses en términos generales, no quieren vivir de la misma manera. Y hay dos cosas que un cubano no cambiaría por ningún bien de la civilización estadounidense: es la educación de sus hijos y la sanidad", comentó.

Cuba como elemento de inspiración

Uno de los aspectos que le da carisma al país caribeño es lo que podría llamarse poder blando, opina Mezhúyev. Especialmente en los años 60 Cuba se convirtió en un símbolo de la idea de libertad, no solo en la URSS, sino también en EEUU, comenta.

"Una generación entera de jóvenes estadounidenses creció considerando al Che Guevara y a Fidel Castro héroes positivos. (…) Por eso, la parte demócrata de EEUU siente en relación a Cuba un cierto entendimiento y reconocimiento", dijo.

Al mismo tiempo, Psheníchnikov añadió que tampoco hay que olvidarse de que todo lo que ocurrió en América Latina después de 1959 se debió a la influencia cubana.

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"Si no hubiera sido por Cuba, no existiría la actual Venezuela, Nicaragua, ni el actual presidente de Bolivia, Evo Morales. Precisamente por eso Cuba es considerada por EEUU como su principal problema en el hemisferio oeste", concluyó el experto.

Relaciones con Rusia

Cuando se habla de las relaciones entre los dos países, no es la cooperación económica la que más importa, afirma Psheníchnikov. Según él, Cuba debe considerarse el integrante de un gran juego geopolítico donde está en el bando de Rusia, que se opone a Occidente.

Definitivamente, Rusia está interesada en que en el mundo haya una importante alternativa izquierdista, especialmente en el hemisferio oeste, opina Mezhúyev.

"Hasta ahora Cuba fue un importante factor geopolítico que tuvo un efecto de contención en relación a EEUU, que sintió la imposibilidad de desplegarse por completo en el hemisferio este mientras tiene a su lado una 'ola izquierdista' en América Latina", explicó.

Puesto que Cuba es el epicentro de esta "ola izquierdista", es evidente que Rusia está interesada en su existencia, concluyó el experto.

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