"Niños y jóvenes son el bien más preciado de una nación, es inadmisible que sufran cualquier tipo de violencia; el ambiente escolar debe ser sagrado", expresó en su cuenta de la red social Twitter, e informó que se desplazará personalmente a Suzano para seguir de cerca la situación.
Otras autoridades del país, como el presidente del Congreso Nacional, Davi Alcolumbre y el presidente del Tribunal Supremo Federal, Dias Toffoli, también se manifestaron contra lo ocurrido y expresaron su solidaridad a los familiares de las víctimas.
El presidente Jair Bolsonaro fue de los últimos en pronunciarse y lo hizo a través de Twitter, donde destacó que la matanza es una "monstruosidad y cobardía sin tamaño".
Dos jóvenes de 17 y 25 años mataron a ocho personas (entre ellos cinco alumnos de entre 15 y 17 años) y se suicidaron poco después; también dejaron nueve heridos, varios de ellos graves.