"El director expresó su opinión sobre algunos de los vídeos que aparecieron tras el ataque, pero nunca llegó a afirmar que no hubo tal ataque", dijo el portavoz de la BBC.
"Tras seis meses de investigación puedo confirmar, sin duda alguna, que la escena filmada en el hospital de Duma fue un montaje", escribió Dalati al indicar que "no había víctimas en el hospital".
"Hubo ataque, el gas sarín no se utilizó, pero debemos esperar los informes de la OPAQ (Organización para la Prohibición de las Armas Químicas) para saber si se utilizó cloro", comentó Dalati.
Señaló que "todo lo demás relacionado con el ataque fue un montaje para producir un mayor efecto".
Occidente acusó del ataque químico a Damasco y le amenazó con represalias.
La organización no gubernamental Cascos Blancos utilizó como prueba de la culpabilidad de Damasco un vídeo donde aparecen vecinos de Duma supuestamente intoxicados por el ataque y médicos que tratan de salvarlos.
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El Ministerio de Defensa de Rusia declaró que las informaciones sobre el uso de sustancias tóxicas por las fuerzas gubernamentales sirias tienen como objetivo defender a los terroristas y justificar las posibles medidas de represalia desde el exterior.