"Conocido popularmente como el Gallego Fernández, atesoró una destacada trayectoria al servicio de la Revolución cubana, ocupó diferentes responsabilidades en las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), el Estado y el Gobierno, y en el Comité Olímpico cubano", subraya el comunicado.
Hasta su muerte fue miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular (parlamento).
Después del golpe de Estado ejecutado por el general Fulgencio Batista en 1952, Fernández comenzó a conspirar con un grupo de jóvenes oficiales, que fueron descubiertos y juzgados en un Consejo de Guerra Sumarísimo y condenados a cárcel en el presidio de la antigua Isla de Pinos (hoy Isla de la Juventud), donde permaneció hasta el triunfo de la Revolución en enero de 1959.
Por encargo del comandante Fidel Castro, líder de la Revolución cubana, Fernández se incorporó al Ejército Rebelde como director de la Escuela de Cadetes en La Habana, y ascendido al grado de capitán.
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Entre otras responsabilidades fue viceministro de las FAR hasta 1970, ministro de Educación (1972-1990), vicepresidente del Consejo de Ministros (1978-2012), presidente del Comité Olímpico Cubano (1997-2018), diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular (1976-2018), y miembro del Consejo de Estado (1981-1993).
Era general de división de la reserva y sus restos serán cremados, según su última voluntad.