"La estrategia y táctica [del abogado de Bútina] en el procedimiento judicial van dirigidas a que sea puesta en libertad en febrero", dijo el hombre al añadir que será "un éxito" si su hija resulta deportada.
Actualmente, Bútina está encerrada en una cárcel estadounidense y, según fuentes de la embajada rusa en EEUU, su régimen de aislamiento fue prolongado.
La próxima audiencia donde se revisará el régimen de reclusión está programada para el 27 de diciembre pero, destacó, es difícil prever cuál será la decisión.
Aprovechando su encuentro con los periodistas el padre de Bútina pidió ayuda financiera, aunque sea mínima, para pagar los servicio de los abogados para su hija.
El líder de la organización sin ánimo de lucro Derecho a las Armas, Viacheslav Vaneev, anunció a los medios que se creó una fundación para recaudar fondos para pagar los abogados de Bútina.
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El activista constató que las deudas ante el equipo de defensa de Bútina ascienden a 436.000 dólares.
María Bútina, graduada en relaciones internacionales en una universidad estadounidense, fue arrestada el 15 de julio en Washington por supuesta conspiración para actuar como agente extranjero sin registrarse ante el Departamento de Justicia de EEUU.
Un tribunal estadounidense aceptó la semana pasada la declaración de culpabilidad de Bútina, referente a los cargos de conspiración con varios individuos contra EEUU.
La rusa afirmó además que no fue obligada a declararse culpable.
Según la jueza del caso, Tanya Chutkan, Bútina enfrenta una condena de hasta cinco años de prisión y una multa de 250.000 dólares luego de haberse declarado culpable.
Rusia ha expresado reiteradamente que las acusaciones contra Bútina son totalmente infundadas.
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El Ministerio de Exteriores ruso llama a la inmediata liberación de la ciudadana rusa.