"El ataque aéreo destruyó completamente dos edificios que se utilizaban por altos cargos de ISIS para reuniones regulares", dice el comunicado del organismo.
El Ministerio de Defensa subrayó que el bombardeo efectuado disminuyó la probabilidad de que ISIS continúe actuando en la región de Hajin.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto en el que las tropas gubernamentales se enfrentan a facciones armadas de la oposición y a grupos terroristas.
Tras la derrota de ISIS a finales de 2017, pasaron al primer plano la normalización de la situación política, la reconstrucción económica y el regreso de los refugiados.
En paralelo, se realizan operaciones para acabar con lo que queda de ISIS en el país.
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