En la práctica, esta disposición rebaja drásticamente los precios de los vuelos, como se pudo ver en las últimas horas. Las aerolíneas iniciaron una 'guerra' de precios para intentar llevar más clientes. No solo las nuevas de bajo coste, sino también las tradicionales, como Aerolíneas Argentinas o Latam.
A inicios de enero, con su inicio de operaciones, la empresa Flybondi —un juego de palabras entre 'fly', volar en inglés, y 'bondi', denominación informal que se le da al bus en Argentina— había propuesto tarifas sensiblemente más bajas que las competidoras.
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Con la entrada en vigor del decreto, Flybondi ofreció miles de asientos a 199 pesos argentinos por tramo (alrededor de siete dólares) por toda Argentina, que se acabaron rápidamente. Para los que no hayan accedido a la promoción, un vuelo desde El Palomar a Córdoba cuesta desde 599 pesos por tramo (21,7 dólares).
Cabe destacar que la tarifa de Flybondi no incluye más que un equipaje de mano de seis kilogramos, y que cualquier adicional debe ser facturado por separado. El trayecto, de algo más que una hora de duración, puede llegar a costar entre 150 y más de 200 dólares bajo un transporte aéreo convencional, o con menos de 30 días de anticipación.
Aerolíneas Argentinas, la compañía estatal de bandera, también salió a dar batalla para ganar clientela con la liberalización de los precios. Las rebajas rondaron el 50% del precio de lista habitual.
Así, un pasaje Buenos Aires-Bariloche, que podía costar desde 2.000 pesos (72 dólares), ahora ronda los 900 (32 dólares). La compañía de bandera ofrece la misma modalidad de las low cost. Cualquier servicio extra debe ser pagado por separado.
La sucursal argentina de Latam, que junto con Aerolíneas Argentinas domina el mercado interno, lanzó una promoción con precios desde 449 pesos por tramo (16 dólares). A diferencia de las otras ofertas, los afortunados que accedan a las tarifas bajas podrán despachar una maleta de 23 kilos sin costo.
En escala internacional, Buenos Aires es la primera escala sudamericana de la aerolínea de bajo costo Norwegian. La compañía estableció una ruta de largo alcance desde y hacia Londres con precios en el entorno de 400 euros por tramo. La tarifa más barata incluye solo un equipaje de mano. Los extras —incluida la comida en el vuelo transoceánico— son pagos.