"Los aliados aprobaron prolongar la financiación de las fuerzas de seguridad afganas hasta el año 2024", dijo Stoltenberg en una rueda de prensa sin dar más detalles.
También está interesada en "lograr avances en el desarrollo de su asociación política y práctica con Afganistán".
Afganistán vive una situación de inestabilidad política, social y de seguridad a raíz de los ataques que lanzan el movimiento radical Talibán y, desde 2015, el grupo terrorista ISIS (prohibido en Rusia y otros países) pese a la fuerte presencia militar de Estados Unidos y otros países de su órbita.
Estados Unidos y sus aliados invadieron Afganistán en 2001, en respuesta a los ataques terroristas del 11-S en Nueva York y Washington.
La misión en Afganistán concluyó en 2014, sin embargo, la OTAN anunció el 1 de enero de 2015 una nueva operación bautizada Apoyo Decidido, para entrenar y asistir a las fuerzas de seguridad afganas.