"[En caso de un ataque por parte de EEUU] no apoyaremos ni a EEUU ni a Asad. No estamos en conflicto con Washington, tampoco con Moscú. Tenemos buenas relaciones con Rusia, además somos aliados de EEUU en la OTAN", dijo a Sputnik Mehmet Metiner, diputado y miembro de la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento.
"El fortalecimiento de las posiciones de Moscú en Siria y su papel como actor dentro de la exitosa unión a tres bandas entre Turquía, Irán y Rusia, molesta a otras partes implicadas en el conflicto. Podría tratarse de un intento de socavar esta coalición", indicó el parlamentario.
Asimismo, afirmó que su país no va a actuar en contra de sus propios intereses en el marco de las tensiones entre Rusia y EEUU.
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"Ankara debe tener en cuenta, en primer lugar, sus propias prioridades y adoptar medidas de acuerdo con ellas", señaló el diputado otomano.
"Hay que utilizar los instrumentos de la diplomacia, fortalecer la interacción con los países vecinos de la región", señaló el diputado opositor.
También destacó la importancia de la integridad territorial de Siria y la estabilización de la situación en la región.
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La situación en Siria se agravó considerablemente después de que el 7 de abril grupos de la oposición armada y varias ONG relacionadas acusaran a las Fuerzas Armadas del Gobierno de Bashar Asad de haber utilizado armas químicas en la ciudad de Duma, en Guta Oriental.
Damasco rechazó las acusaciones y agregó que Washington utiliza la información sobre el presunto ataque químico como un pretexto para invadir a Siria. Rusia declaró que el supuesto ataque con armas químicas es un "montaje".