"EEUU expresa su solidaridad al Reino Unido, su aliado más cercano", según se desprende de un comunicado al que tuvo acceso Sputnik.
La primera ministra británica Theresa May habló el miércoles en el Parlamento de su país, donde responsabilizó a Moscú por el envenamiento del exespía ruso Serguéi Skripal y su hija y anunció, como represalia, la expulsión de 23 diplomáticos rusos y la cancelación de todos los contactos de alto nivel entre ambos países.
El 4 de marzo, Skripal y su hija Yulia fueron hallados inconscientes en el banco de un centro comercial en la ciudad británica de Salisbury (sur).
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Ambos continúan en estado crítico y están siendo tratados por una posible exposición a un agente nervioso.
Skripal fue reclutado por la agencia británica MI6 cuando servía en el Ejército ruso en los años 90.
En 2006 la justicia rusa lo condenó a 13 años de cárcel por espiar a favor de un Estado extranjero y cuatro años después fue canjeado junto con otros dos espías por 10 personas detenidas en EEUU.
Reino Unido acogió a Skripal y le concedió la ciudadanía británica, según lo confirmó la policía metropoltana de Londres, Scotland Yard.