"Entre los días 7 y 14 de febrero se registraron 140 tiroteos/disparos en la región metropolitana de Río, 17,5 al día", informó la aplicación en un comunicado.
Bajó un 8% el número de muertos y un 28% el de heridos (en 2017 fueron 26 muertos y 43 heridos).
La aplicación Fuego Cruzado no es oficial, pero fue impulsada por diversos especialistas en materia de seguridad, sociólogos y líderes comunitarios.
El propio gobernador del estado de Río de Janeiro, Luiz Fernando Pezão, admitió el 14 de febrero que el esquema de seguridad diseñado para los días de Carnaval había fallado.
Aunque aún no hay datos oficiales la prensa local habla de un aumento importante de los robos y atracos en estos días de fiesta, cuando alrededor de seis millones de personas salieron a las calles de la ciudad.