"El equipo humanitario de las Naciones Unidas en Siria advierte de las terribles consecuencias de la agravación de la crisis humanitaria en varias partes del país", señala una declaración difundida por la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
El documento menciona en particular la grave situación de los civiles atrapados en Afrín, donde Turquía mantiene una operación militar contra grupos terroristas y milicias kurdas; la devastación y la inseguridad en Al Raqa, donde los servicios están ausentes y las municiones sin detonar matan o dejan heridos a muchos refugiados que retornan a la zona; el incremento de las víctimas y los desplazamientos a raíz de las operaciones bélicas en Idlib, el continuo asedio de grupos armados a las aldeas de Fua y Kefraya; y la falta de acceso humanitario al campo de refugiados de Rukban, en la frontera con Jordania.
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