"Es evidente que al hacer avanzar sus instalaciones de defensa estratégica en el Noreste asiático, EEUU paso a paso incrementa las posibilidades de realizar operaciones militares contra los países de la región", dijo.
Corea del Sur y Estados Unidos reaccionaron a las provocaciones de Pyongyang con la celebración de maniobras militares conjuntas en la región y el despliegue del escudo antimisiles norteamericano THAAD en el territorio surcoreano.
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Japón, al contrario, expresó su apoyo a esa iniciativa, alegando que la misma garantizaría una mayor estabilidad en la zona.
El sistema THAAD (por las siglas en inglés de Defensa Terminal de Área a Gran Altura) está diseñado para detectar misiles balísticos con radar terrestre e interceptarlos a una altitud de entre 40 y 150 kilómetros.
Alternativa a las sanciones
Celebrar negociaciones a seis bandas basadas en la hoja de ruta ruso-china representaría una alternativa a reforzar las sanciones y la presión contra Corea del Norte, declaró el embajador ruso en Seúl, Alexandr Timonin.
"Estoy convencido de que una alternativa verdadera al reforzamiento de las sanciones y de la presión militar contra Corea del Norte consistiría en iniciar negociaciones a seis bandas con base en la hoja de ruta ruso-china de tres etapas encaminada a solucionar los problemas de la península de Corea", dijo.
Según el embajador, la diplomacia rusa considera como su tarea más importante en la península contribuir a este proceso.
El 11 de septiembre pasado el Consejo aprobó por unanimidad la resolución 2375 que impone nuevas restricciones contra Pyongyang, reduciendo sustancialmente sus posibilidades en exportaciones e importaciones.
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A finales de diciembre de 2017 fue aprobada la resolución 2379 que amplió el embargo comercial a Pyongyang y redujo aún más sus oportunidades de financiación desde el extranjero.
La primera fase supone el cese de los ejercicios militares de Washington en la región y de los ensayos balísticos y nucleares de Pyongyang.
La segunda etapa establece el diálogo directo entre los Gobiernos estadounidense y norcoreano.
Por último, el inicio de las negociaciones multilaterales para crear un mecanismo de paz y seguridad en el nordeste asiático.
Las relaciones entre las dos Corea
Las relaciones entre Seúl y Pyongyang se mantienen en un nivel muy bajo, declaró Alexandr Timonin.
"Desgraciadamente, pese a los indicios positivos de los últimos tiempos en los contactos coreanos, las relaciones entre la República de Corea y la República Popular Democrática de Corea permanecen en un nivel extremamente bajo", señaló el embajador ruso.
El pasado 9 de enero, las delegaciones de las dos Coreas mantuvieron sus primeras conversaciones directas en los últimos dos años y acordaron la participación de deportistas norcoreanos en los Juegos Olímpicos de Pyeongchang, que se celebrarán entre el 9 y el 25 de este mes.
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El 17 de enero, Pyongyang y Seúl acordaron que los atletas de ambas Coreas desfilarán juntos bajo la bandera de la unificación coreana en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos.
Además, se acordó la creación de una selección conjunta de hockey sobre hielo femenino.
Cooperación trilateral
Proyectos económicos entre Seúl, Pyongyang y Moscú contribuirían a la normalización en la península coreana, indicó el embajador de Rusia en Corea del Sur.
"Considero que la implementación de proyectos económicos tripartitos con participación de Rusia, de la República de Corea y la República Popular Democrática de Corea abre enormes oportunidades para la normalización coreana", realzó Timonin en la entrevista a Sputnik.
Reconoció sin embargo que pese a los recientes pequeños avances positivos, es temprano hablar de una reanudación del proyecto de construcción de un gasoducto entre Rusia y Corea del Sur a través del territorio norcoreano.
Asimismo, el embajador ruso recalcó que la colaboración energética entre Moscú y Seúl podría contribuir a reforzar la estabilidad en la península de Corea.
"Parece prometedor el desarrollo de la cooperación energética (…) además de dar beneficios económicos podría contribuir a reforzar la estabilidad en la península de Corea", afirmó.
A la vez, el embajador recordó que se está debatiendo una futura adhesión de Seúl al Consejo del Ártico y la participación de las empresas surcoreanas en la exploración de la Ruta Marítima del Norte.
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Durante su intervención en el Foro Económico Oriental, celebrado en Vladivostok en septiembre pasado, el presidente surcoreano, Moon Jae-in propuso a Rusia tender "nueve puentes" de cooperación en una serie de ámbitos, incluidos la energía y el transporte.
Más tarde, el primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, expresó el interés de Rusia por esa iniciativa.
En septiembre de 2011 la empresa rusa Gazprom y la surcoreana Kogas firmaron una hoja de ruta sobre un proyecto de envíos de gas ruso a Corea del Sur.
La ruta más corta, de 1.100 kilómetros, supone atravesar 700 kilómetros del territorio norcoreano y costaría, según los cálculos de Kogas, 2.500 millones de dólares.