Se refieren al llamado Grupo de Visegrado —Polonia, Chequia, Eslovaquia y Hungría-Polonia—.
La UE no está contenta con sus miembros del Este, ya que considera que no siempre cumplen los principios democráticos. Sin embargo, los desacuerdos con Bruselas no anulan el hecho de que Europa del Este se esté desarrollando rápidamente en términos económicos, y aquí Budapest adelanta a cualquier capital occidental.
El año pasado, Rumanía mostró el crecimiento más sólido, con un aumento del PIB de un 6,4% anual. Polonia, República Checa y Hungría también mostraron un desarrollo más intenso que los países de Europa occidental y las tasas de desempleo más bajas de la región.
Así, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha afirmado que Europa del Este "hace más para fortalecer la UE de lo que nadie podría haber imaginado en 2004", cuando los países de Visegrado se unieron al Eurogrupo.
"Esta es la región de más rápido crecimiento en la Unión Europea, sin la cual no podría hablarse de crecimiento en general", dijo Orbán a los periodistas, subrayando que "en las discusiones sobre el futuro de la UE, Hungría quiere jugar un papel proporcional a su contribución".
"Si no están completamente decepcionados de los ideales democráticos, por lo menos los cuestionan. Habrá un cierto retroceso", aseveró Oznobíshchev.
Asimismo, ya se sabe que el punto más controvertido en las relaciones entre los países del Grupo de Visegrado y Bruselas es la política de la Unión Europea de acogida de refugiados, que Europa del Este rechaza implementar.
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"Hoy una disputa con Bruselas que es objetivamente beneficiosa. A finales de este año los subsidios de la UE a Europa del Este acaban, y estos países se encuentran con obligaciones pero sin subsidios. Es una realidad mucho menos interesante de lo que era antes", explica Kiril Kóktish, politólogo y profesor de la Universidad de Relaciones Internacionales de Moscú (MGIMO).
Mientras tanto, los líderes del Grupo de Visegrado creen que, en un futuro cercano, la situación cambiará radicalmente. Según Orbán, para el año 2030 "la Unión Europea será financiada principalmente por Alemania y los países de Visegrado".