"Esta decisión del Gobierno a través de su Constituyente de fijar la fecha del proceso electoral unilateralmente es una violación grave para los acuerdos que se habían establecido en República Dominicana, con lo cual el Gobierno le da una patada a la mesa de negociación", dijo el diputado opositor Simón Calzadilla, uno de los delegados al diálogo.
Por su parte, el parlamentario José Olivares, también de la bancada opositora de la Asamblea Nacional (parlamento unicameral), consideró que la convocatoria a elecciones es ilegal.
"El Gobierno quebró el diálogo con un llamado hecho por un órgano inconstitucional para unas elecciones en abril", indicó Olivares a esta agencia.
Precisamente uno de los aspectos que estaba en negociación era las "condiciones para las [elecciones] presidenciales".
El borrador del acuerdo entre las partes, presentado el pasado 15 de enero por el jefe de la delegación oficialista Jorge Rodríguez, preveía que esos comicios se realizarían en el segundo semestre de 2018.
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Los voceros de la oposición exigían la renovación de los rectores del Consejo Nacional Electoral mediante un consenso entre las partes y la ampliación de la observación electoral, que en las últimas elecciones ha estado acompañada solo por el Consejo de Expertos Electorales de América Latina (CEELA).
Explicación del Gobierno
La propuesta de convocar elecciones antes de que culmine el mes de abril fue realizada por el constituyente y segundo al mando del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, y fue aprobada el mismo miércoles en la Asamblea Nacional Constituyente.
Cabello prefirió que no se calificara la decisión como un adelanto de los comicios presidenciales.
"Nadie le puso fecha en diciembre, no es verdad [que se haya adelantado], las elecciones son en 2018, pero nadie dice que en diciembre, puede ser en cualquier momento de 2018", añadió.
Las tres que se pautaron en otros períodos fueron la del año 2000, cuando se relegitimaron todos los cargos de elección popular, cumpliendo con lo establecido en la Carta Magna de 1999, impulsada por el entonces presidente Hugo Chávez (1999-2013), quien resultó reelegido.
En el 2012, el parlamento también decidió adelantar las elecciones para el mes de octubre, y en 2013 para abril (período 2013-2019), ante la muerte de Chávez en marzo y en las cuales resultó elegido Nicolás Maduro.
El dirigente del PSUV expuso que si las elecciones se convocaban para finales de 2018 "impedirían tomar unas decisiones que hay que tomar para defender al pueblo de la guerra económica", sin dar detalles sobre estas medidas.
Para el diputado Olivares es ilógico que las elecciones se realicen en abril, cuando la toma de posesión habitualmente se hace en enero.
"Si la oposición venezolana llegara a ganar las elecciones, el país tendría que esperar casi nueve meses para que entreguen la presidencia; eso no tiene sentido", observó.
Ir o no a las elecciones
La coalición de partidos de oposición Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que no ha emitido un pronunciamiento oficial tras el anuncio de la Constituyente, se encontraba el miércoles reunida para debatir el asunto y se espera que en los próximos días anuncie su decisión.
Pese a que inicialmente la MUD resolvió no participar, posteriormente algunos partidos cambiaron de opinión.
El partido que representa Simón Calzadilla, Avanzada Progresista, adelantó a Sputnik que va a participar y presentó a Henri Falcón, uno de sus dirigentes, como aspirante a la presidencia.
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Calzadilla opinó que se debe participar y que el candidato debe elegirse por consenso y no en primarias como ha planteado otra parte de la oposición.
En cambio, Olivares, del partido Primero Justicia, señaló que la oposición no debe ir a estos comicios.
"No debería haber candidato que acepte postularse bajo esas condiciones y creo que el que lo haga le está haciendo un favor al Gobierno, porque estaría legalizando el rompimiento de todo el Estado de derecho, no deberíamos participar en un proceso electoral en el cual no hay condiciones", expuso.
Presión internacional
La carta que la oposición debe utilizar, según Olivares, es "la presión internacional" al presidente Nicolás Maduro para que se celebren unas elecciones con supervisión internacional e igualdad de condiciones.
Por su parte, los voceros del Gobierno han expresado que cuanto antes se convoque será mejor, instando al poder electoral a pronunciarse lo antes posible.
Maduro ya anunció su intención de candidatearse, y dirigentes oficialistas han dejado claro que el único favorito para postularse es el actual mandatario.