"Esa dirigencia derechizada actúa más como un partido político antes que como representante de los trabajadores", señaló la autoridad, en referencia al paro convocado por la COB el 10 de enero en rechazo al nuevo Código Penal y que se cumple de manera parcial.
El Gobierno puso en la mira al máximo dirigente de la COB, Guido Mitma, a quien acusó de promover una medida injustificada con fines "político electorales" y de haber abandonado los intereses de los trabajadores.
Según el ministro Martínez, el paro convocado por la COB generó el rechazo de algunas centrales obreras departamentales.
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Por otro lado, sectores de transportistas, gremialistas, maestros urbanos y juntas vecinales de algunas capitales respaldaron el paro decretado por la central sindical que tiene previsto ampliar sus protestas contra el código penal hasta el jueves.