Noboa y la vicepresidenta Abad: un conflicto que inició en la campaña electoral ecuatoriana
Noboa y la vicepresidenta Abad: un conflicto que inició en la campaña electoral ecuatoriana
Sputnik Mundo
Las rispideces en el vínculo entre el presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, y su vicepresidenta, Verónica Abad, coronado con la designación de la última como... 29.11.2023, Sputnik Mundo
Lejos de generar sorpresa en el ámbito político ecuatoriano, la ausencia de Verónica Abad —vicepresidenta en ejercicio del Ecuador—, en las actividades oficiales de Presidencia, tales como la fotografía oficial del gabinete ministerial de la nueva administración en el Palacio de Carondelet, confirma el distanciamiento entre el binomio presidencial del Ecuador.La confirmación de este escenario de confrontación fue la designación de Abad, mediante decreto del pasado 24 de noviembre, como embajadora de paz para evitar la escalada de violencia en el conflicto entre el Estado de Israel y el movimiento palestino Hamás, cuyo cargo mantiene sede estable en la ciudad de Tel Aviv.El distanciamiento entre Abad y Noboa "empezó en la campaña electoral. De hecho, durante toda la época de campaña nunca aparecieron juntos. Era evidente que había una ruptura", estimó el politólogo y académico ecuatoriano Henry Allan, en una conversación con Sputnik.El experto señala que la Constitución Política del Ecuador dispone que el vicepresidente "se encargará de las tareas que le designe el presidente". Es decir, "ella no puede rechazar el encargo presidencial", advirtió.Para el politólogo ecuatoriano, la falta de una tradición institucional, unido a la ausencia de un proyecto común que sirva de base para el actual ejercicio de Gobierno, se ve reflejada en las desavenencias entre el binomio presidencial."El presidente Noboa no viene de ningún partido político y Verónica Abad tampoco viene de ningún proceso político. Son dos personas, por lo menos en el discurso, diferentes, que se juntan para lanzarse en una campaña presidencial", destacó Allan.De acuerdo al analista, el hecho de que tanto Noboa como Abad carezcan de una estructura partidista sólida e independiente, los obliga a confluir en un binomio presidencial sin un proyecto político en común.Incluso, agrega el académico, "ha sido confrontada a nivel político por reuniones que mantuvo en Madrid con personeros de Vox, sin informar a la cancillería ecuatoriana".Sin embargo, lo que hay que señalar es “cómo se deshacen de la vicepresidenta", consideró el experto."Es una fórmula un poco grotesca. Ecuador es un país muy pequeño, con poco peso internacional y haberla declarado como mediadora de paz en la guerra entre Hamas e Israel es casi burlesco", enfatizó.Detrás de las tensiones entre Noboa y su vicepresidenta "se esconde la posibilidad de que la señora Abad se convierta en una figura política y en un ícono para los sectores más derechistas de este país", advirtió Allan.Junto con desestimar problemas que afecten la gobernabilidad interna en el corto y mediano plazo, a partir del distanciamiento entre los componentes de la fórmula presidencial ecuatoriana, Allan subraya que Abad se puede posicionar como una mártir política, "si logra usar este escenario para convertirse en una opositora de peso", precisó."Me parece preocupante que convirtamos a una desconocida en una figura política importante y su discurso de odio empiece a calar en amplios sectores de la sociedad. Con este decreto de mandarla a Israel, la están convirtiendo en una especie de víctima y probable opositora política y un ícono para los sectores más derechistas", señaló.
Las rispideces en el vínculo entre el presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, y su vicepresidenta, Verónica Abad, coronado con la designación de la última como embajadora por la paz en el conflicto entre Israel y Hamás, apuntan a un quiebre entre discursos "radicalmente diferentes", comentó a Sputnik el politólogo ecuatoriano Henry Allan.
Lejos de generar sorpresa en el ámbito político ecuatoriano, la ausencia de Verónica Abad —vicepresidenta en ejercicio del Ecuador—, en las actividades oficiales de Presidencia, tales como la fotografía oficial del gabinete ministerial de la nueva administración en el Palacio de Carondelet, confirma el distanciamiento entre el binomio presidencial del Ecuador.
La confirmación de este escenario de confrontación fue la designación de Abad, mediante decreto del pasado 24 de noviembre, como embajadora de paz para evitar la escalada de violencia en el conflicto entre el Estado de Israel y el movimiento palestino Hamás, cuyo cargo mantiene sede estable en la ciudad de Tel Aviv.
El distanciamiento entre Abad y Noboa "empezó en la campaña electoral. De hecho, durante toda la época de campaña nunca aparecieron juntos. Era evidente que había una ruptura", estimó el politólogo y académico ecuatoriano Henry Allan, en una conversación con Sputnik.
El experto señala que la Constitución Política del Ecuador dispone que el vicepresidente "se encargará de las tareas que le designe el presidente". Es decir, "ella no puede rechazar el encargo presidencial", advirtió.
Para el politólogo ecuatoriano, la falta de una tradición institucional, unido a la ausencia de un proyecto común que sirva de base para el actual ejercicio de Gobierno, se ve reflejada en las desavenencias entre el binomio presidencial.
"El presidente Noboa no viene de ningún partido político y Verónica Abad tampoco viene de ningún proceso político. Son dos personas, por lo menos en el discurso, diferentes, que se juntan para lanzarse en una campaña presidencial", destacó Allan.
De acuerdo al analista, el hecho de que tanto Noboa como Abad carezcan de una estructura partidista sólida e independiente, los obliga a confluir en un binomio presidencial sin un proyecto político en común.
Noboa, "en el papel, se reconoce como socialdemócrata e incluso se ha definido de centroizquierda". Mientras que Abad sostiene un discurso "que empata muy bien con lo que ha sido el discurso de la ultraderecha en América Latina", similar al de Javier Milei o del expresidente estadounidense Donald Trump (2017-2021)", enfatizó Allan.
Incluso, agrega el académico, "ha sido confrontada a nivel político por reuniones que mantuvo en Madrid con personeros de Vox, sin informar a la cancillería ecuatoriana".
Sin embargo, lo que hay que señalar es “cómo se deshacen de la vicepresidenta", consideró el experto.
"Es una fórmula un poco grotesca. Ecuador es un país muy pequeño, con poco peso internacional y haberla declarado como mediadora de paz en la guerra entre Hamas e Israel es casi burlesco", enfatizó.
Intentarán alejarnos, pero el eco de nuestra voz nos liberará.
Detrás de las tensiones entre Noboa y su vicepresidenta "se esconde la posibilidad de que la señora Abad se convierta en una figura política y en un ícono para los sectores más derechistas de este país", advirtió Allan.
Junto con desestimar problemas que afecten la gobernabilidad interna en el corto y mediano plazo, a partir del distanciamiento entre los componentes de la fórmula presidencial ecuatoriana, Allan subraya que Abad se puede posicionar como una mártir política, "si logra usar este escenario para convertirse en una opositora de peso", precisó.
"Me parece preocupante que convirtamos a una desconocida en una figura política importante y su discurso de odio empiece a calar en amplios sectores de la sociedad. Con este decreto de mandarla a Israel, la están convirtiendo en una especie de víctima y probable opositora política y un ícono para los sectores más derechistas", señaló.
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