"Éste es un mandato constitucional pendiente desde gobiernos pasados, para la incorporación de mujeres al mercado laboral en igualdad de oportunidades, lo cual puede favorece también a los hombres, eliminando la brecha salarial", dijo la ministra de Trabajo, Verónica Navia.
Navia destacó el apoyo del presidente Luis Arce al decreto anti-discriminación laboral, que según explicó fue concertado durante el pasado Gobierno de Evo Morales (2006-2019), que no llegó a aprobarlo por la crisis política de 2019.
La norma, aprobada el miércoles y publicada el viernes en la Gaceta Oficial, fue elaborada conjuntamente por el estatal Servicio Plurinacional de la Mujer, una alianza de organizaciones sociales de mujeres y el Ministerio de Trabajo.
"Estamos planteando la gestión integral del tratamiento de la violencia de género porque consideramos que generar autonomía económica de las mujeres es importante para favorecer la lucha contra la violencia sexual", apuntó la ministra.
El decreto establece "la igualdad de oportunidades en el acceso al empleo, la remuneración y el trato igualitario en el trabajo entre mujeres y hombres, con el fin de contribuir en la eliminación de la brecha salarial", definida como "diferencia de remuneración basada en el sexo de las personas, sin criterios objetivos".
La norma de igualdad laboral se suma a otras como el régimen electoral paritario cuyo principal resultado es que en el actual parlamento boliviano las mujeres sean casi la mitad en la Cámara de Diputados y mayoría en el Senado.