"El 16 de noviembre se celebró la firma de un protocolo para modificar el convenio de doble imposición entre Rusia y Luxemburgo", dice el comunicado.
El protocolo deberá ser ratificado hasta finales de este año, para que pueda entrar en vigor el 1 de enero de 2021.
Unos protocolos similares fueron firmados por Rusia con Chipre y Malta. Igual que en aquellos documentos, el protocolo con Luxemburgo prevé ciertas exenciones fiscales.
En concreto, "para las inversiones institucionales, así como para las empresas públicas que tienen al menos 15% de las acciones en libre circulación y que poseen al menos 15% del capital de una empresa que paga los ingresos en cuestión durante un año" se establece la tasa impositiva del 5%.
Además, las modificaciones no afectarán los ingresos de intereses pagados por euroobligaciones, préstamos en bonos de las empresas rusas y préstamos de los bancos extranjeros.
A finales de marzo pasado el presidente ruso, Vladímir Putin, decretó gravar con un impuesto del 15% los ingresos en forma de dividendos e intereses trasferidos a las cuentas en el extranjero. La medida, tomada con el fin de frenar la fuga de capitales, requiere modificar los acuerdos de doble imposición firmados con otros países.
Putin advirtió que Rusia romperá dichos acuerdos con aquellos países que rechacen las propuestas rusas.