El 6 de agosto, el presidente Donald Trump promulgó las órdenes ejecutivas que prohíben realizar, a partir de los 45 días posteriores a la firma, cualquier transacción con las telecos chinas Tencent y ByteDance, respectivos creadores del servicio de mensajería instantánea WeChat y de la aplicación de vídeos TikTok, por presuntas amenazas que representan para la seguridad nacional, política exterior y economía de EEUU.
El portavoz de la Cancillería china, Wang Wenbin, resaltó que estas empresas "se atienen a las reglas internacionales y los principios de mercado", mientras que "Washington, esgrimiendo como pretexto la seguridad nacional, incurre constantemente en abusos de autoridad y ejerce una presión inmotivada sobre compañías chinas",
"Una conducta claramente hegemónica, a la que China se opone tajantemente", sentenció.
El diplomático reprochó a Washington por "sacrificar los intereses de consumidores estadounidenses" y le exhortó a "atender la voz de la razón, rectificar sus errores, así como dejar de politizar los asuntos económicos y presionar a determinadas empresas.