Lo que con tanta seguridad se creía que era lava marciana podría ser lodo. Esta es la conclusión a la que ha llegado un grupo de científicos internacional al analizar una simulación de lodo del planeta vecino y compararla con su equivalente en la Tierra.
La zona norte de Marte está cubierta de decenas de miles de formaciones que tienen un aspecto similar al de los volcanes terrestres. Precisamente por eso, esas estructuras tienden a ser interpretadas como si de volcanes se tratara y se suele considerar que la materia que expulsan es lava.
No obstante, el coautor del estudio Petr Broz tenía serias dudas sobre esto y se decidió a investigar el fenómeno.
Para eso, Broz recurrió al doctor Manish Patel y su equipo de la Universidad Abierta (Open University) del Reino Unido. Esta dispone de una cámara especial que permite recrear de manera fiel esas condiciones del entorno marciano, donde la presión, hasta 150 veces más baja que la terrestre, provoca cambios importantes en el comportamiento de las materias.
Precisamente esa característica fue la que causó que el agua presente en la simulación de lodo sometida al experimento se evaporara rápidamente, para hervir después y, finalmente, congelarse. El resultado es un lodo burbujeante que recuerda a la lava terrestre, y más concretamente a la lava pahoehoe, observada en el volcán hawaiano Kilauea.
"La piel del flujo se congela, pero este flujo es lo suficientemente grueso como para que el interior permanezca fluido. Así que la piel detendrá el flujo por un momento, pero luego el impulso del fluido interior se rompe en los puntos débiles de la piel, y el flujo se propaga hacia adelante. Es como [la lava] pahoehoe, solo que es roca fundida", sostiene el doctor Patel en una entrevista con BBC.
Los resultados del estudio, aunque reveladores, son también comprometedores en tanto que podrían dificultar las investigaciones llevadas a cabo en ese planeta, según Broz: "observaremos algunas características [del espacio] y no sabremos con seguridad si se deben a flujos de lava o a flujos de lodo", dice el doctor de la República Checa.