El COVID-19 es un virus engañoso a la hora de ser identificado en un paciente. Lo creas o no, sus partículas son capaces de desaparecer, de forma que el análisis realizado para identificarlo no lo detecte.
El especialista del Hospital Clínico de Enfermedades Infecciosas núm. 2 Víktor Maléyev explica cómo se produce este fenómeno:
"El nuevo coronavirus es muy astuto: puede aparecer y desaparecer de nuestro organismo. ¿A qué me refiero? Si el paciente ha tenido la garganta muy seca y ha hecho gárgaras (…), es posible que el virus no aparezca en los análisis. Y en la siguiente prueba vuelve a aparecer. Por eso es necesario repetir el análisis varias veces", aclara Maléyev.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el SARS-CoV-2, que ya ha acabado con la vida de más de 10.000 personas y ha contagiado a cerca de 250.000, como pandemia. Esta enfermedad, además de haber provocado una crisis sanitaria sin precedentes, está afectando a todos los ámbitos.