"Los virus suelen mutar, sus mutaciones pueden ser distintas, en total tenemos en la base de datos varios centenares de virus, y se ve que este muta y cambia (...) pero de momento en el marco de sus propias características", dijo Lióznov en una rueda de prensa sobre el coronavirus.
"Publicamos [la información sobre] este virus en la base global de los virus secuenciados, y ahora se puede comparar con los otros, (...) lo que permite observar cómo cambia el patógeno, cómo se diferencia de aquellos identificados en otros países", indicó.
El científico agregó que estos datos podrían ser usados en la elaboración de vacunas y fármacos contra el coronavirus.
Desde el 11 de marzo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) califica como pandemia la enfermedad COVID-19 causada por la nueva cepa de coronavirus, SARS-CoV-2, detectada en la ciudad china de Wuhan a finales de 2019.
A lo largo del mundo se registraron más de 230.000 casos de infección en más de 170 países, incluidos más de 9.300 decesos. Más de 86.200 personas se recuperaron.
De los casi 135.000 casos activos, más de la mitad se concentra hoy en Italia, España, Alemania, Irán, EEUU, Francia, China y Corea del Sur.