"Uber respeta la ley y las decisiones emitidas por las autoridades. Sin embargo, decisiones como ésta responden también a la ausencia de una reglamentación del servicio de movilidad colaborativa a través de plataformas tecnológicas en Colombia", señaló Uber en un comunicado.
Según el texto, la compañía considera que la decisión de la SIC "es arbitraria" ya que, a su juicio, "va en contra del ordenamiento jurídico colombiano, violando el debido proceso y derechos constitucionales".
En ese sentido, a través de su cuenta de Twitter, Uber indicó que "se está yendo de Colombia" y confió en que "ojalá [sea un] hasta pronto".
Uber recordó que en 2013, cuando llegó a Colombia, "fue la primera compañía en ofrecer al país una alternativa de movilidad innovadora y confiable", y que con la decisión de la SIC "Colombia es el primer país del continente en cerrarle las puertas a la tecnología".
Aclaró que el servicio de Uber Eats no se verá afectado por la decisión de la SIC y que los usuarios podrán mantener el acceso a esa aplicación.
El 9 de enero, a través de una carta dirigida al presidente colombiano, Iván Duque, el abogado Miguel López Forastier, que representa a Uber en el país, anunció que la compañía demandará a la nación por violar el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos.
De acuerdo con el abogado, Uber es una empresa organizada bajo las leyes del Estado de Delaware (EEUU) que "ha realizado varias inversiones en Colombia" y precisó que Uber Colombia, al estar organizada bajo las leyes locales, es una subsidiaria de Uber.
En consecuencia, advirtió, Uber es un inversor protegido de EEUU y Uber Colombia es una empresa protegida en virtud del Tratado.