"La preocupación por la independencia de Cataluña se sitúa como un problema para el 19% de la población", señala el informe.
Se trata de un nuevo récord desde la convocatoria del referéndum, que casi alcanzó el 30%, aunque después retrocedió notablemente.
El primer problema para los españoles continúa siendo el paro, dado que un 60,3% de los encuestados lo mencionan en algún momento.
El segundo es la clase política, que se sitúa en el 45,5%, prácticamente igual que en el anterior barómetro, después de que el Gobierno lleve varios meses en funciones y se celebrasen cuatro convocatorias electorales en cuatro años.
El tercero son los problemas de índole económica, que es citado por un 30% de los encuestados.
Según el barómetro, el 43,9% de los consultados afirmaron que lo que ocurría en Barcelona influiría en su decisión.
Por el contrario, un 54,6% reconocen que su voto no se ve afectado por la situación catalana.
La semana antes de las elecciones del 10 de noviembre, cuando se realizaron estas encuestas, se sucedieron en Cataluña las protestas contra la sentencia del Tribunal Supremo.