"Urgente: nuestros activistas fueron detenidos mientras realizaban una protesta pacífica frente al Palacio del Planalto, en Brasilia, la mañana de este miércoles [23 de octubre]", informó Greenpeace a través de Twitter.
URGENTE: Nossos ativistas foram DETIDOS enquanto realizavam protesto pacífico em frente ao Palácio do Planalto, em Brasília, na manhã desta quarta-feira. https://t.co/FIaHXuXSoA #InimigoDoMeioAmbiente
— Greenpeace Brasil (@GreenpeaceBR) 23 октября 2019 г.
Según el portal de noticias G1, un total de 17 manifestantes fueron detenidos y llevados a una comisaría acusados de depositar de forma ilegal basura en un área pública.
Los activistas protestaron contra la lentitud del Gobierno para atajar la crisis del vertido de petróleo que afecta a las playas del noreste del país.
Los manifestantes también hicieron alusión a los incendios de la Amazonía, colocando una montaña de ramas quemadas frente a la sede del Gobierno.
El portavoz de clima y energía de Greenpeace Brasil, Tiago Almeida, explicó a la prensa local que el objetivo de la protesta es "llamar la atención de las autoridades y de la población sobre la importancia de la gestión responsable de los recursos ambientales".
Esta misma semana, el ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, atacó a Greenpeace en las redes sociales por no estar ayudando a limpiar las playas afectadas por el vertido de petróleo.
Tanto el ministro como el presidente Bolsonaro mantienen un discurso beligerante contra las ONG ambientalistas, a las que acusan de entorpecer el progreso económico del país y de estar al servicio de intereses extranjeros.