Los ministros de Relaciones Exteriores del grupo MITKA "reiteramos nuestra condena más enérgica al terrorismo y al extremismo violento que puede conducir al terrorismo en todas sus formas y manifestaciones, cometidos por quienquiera y por cualquier propósito", indica la declaración conjunta.
El MITKA, instalado en 2013 por los cinco países emergentes, es un espacio informal para el diálogo "con base en sus coincidencias y su pertenencia a otros foros internacionales" como el G20 y la ONU, entre naciones que se consideran "economías abiertas con sistemas democráticos plurales".
Cooperación mundial
Los ataques recientes en Christchurch, Nueva Zelanda, y en la ciudad de El Paso, EEUU, fronteriza con México, entre otros "actos atroces", subrayan la necesidad urgente de incrementar la cooperación internacional y "la acción concertada para prevenir y combatir el terrorismo y el extremismo violento que puede conducir al terrorismo", indica el documento.
Asimismo destacaron las declaraciones de Hamburgo y Osaka de los líderes del G20, que reúne a las mayores economías del mundo, sobre combate al terrorismo, para "prevenir el uso del internet con fines terroristas y de extremismo violento que puede conducir al terrorismo".
Esas potencias económicas medianas ratificaron su compromiso con la defensa de los principios de "un ciberespacio abierto, libre y seguro, de conformidad con las legislaciones nacionales y el derecho internacional, y con pleno respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales, incluida la libertad de expresión y el acceso a la información".
Los cancilleres tomaron nota de los esfuerzos realizados mediante el "Llamado a la Acción de Christchurch" y para promover los derechos humanos así como "erradicar todas las formas de discriminación, xenofobia, racismo e intolerancia religiosa, incluyendo mediante la cooperación internacional".
El grupo MITKA señaló la necesidad de aplicar "un acceso restrictivo a las armas de fuego, medios y tecnologías capaces de causar daño a gran escala (como) otra área de preocupación compartida".
El grupo MITKA consideró que la transformación gradual del sistema internacional en un orden más horizontal, es una oportunidad para que países medianos liberen su potencial constructivo y conciliador frente a problemas internacionales urgentes como los mencionados en la declaración conjunta.
Grupo de Amigos de las Víctimas de Terrorismo
El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, asistió a la primera reunión del Grupo de Amigos de las Víctimas de Terrorismo, en respuesta al "Llamado a la acción de Christchurch" contra los discursos de odio, convocado por Nueva Zelanda en el marco de la 74 asamblea general de la ONU.
En el evento "christchurch ( Masacre en Nueva Zelanda contra la comunidad musulmana) call for action" sumamente importante para México y la comunidad México-norteamericana a partir de la tragedia de El Paso,Texas. Hay compromiso del mundo contra el odio y el terror.
— Marcelo Ebrard C. (@m_ebrard) September 23, 2019
La participación de México en este evento "responde a la preocupación de nuestro país por la propagación global, mediante internet, de discursos de odio que exaltan diferencias entre individuos o grupos con base en la pertenencia étnica, nacional, racial, religiosa, de género u orientación sexual", dijo el jefe de la diplomacia mexicana en una declaración escrita.
Ebrard señala que es fundamental reconocer el papel de las víctimas y las comunidades para atajar el terrorismo y el extremismo violento.
"Estos discursos justifican y alientan acciones de discriminación y, en ocasiones, llaman a la agresión física o a la violencia, como fueron los casos de los atentados en la mezquita de Christchurch y en el supermercado en El Paso, Texas, (frontera sur de Estados Unidos)", dijo el secretario de Relaciones Exteriores.
México considera que las nuevas tecnologías permiten una difusión rápida y masiva de la información, ante la cual los Estados tienen obligaciones que cumplir.
Por ello, convocó a "rechazar la propaganda inspirada y nutrida por la discriminación e intolerancia".
A partir de atentados como el ocurrido en la ciudad de El Paso, perpetrado en agosto pasado por un supremacista blanco, donde la comunidad mexicana fue el blanco del ataque directo, el Gobierno México considera claro que "los discursos de odio, ideologías extremistas o supremacistas y expresiones xenófobas inspiran, alientan o justifican actos violentos".
Por esa razón exigió que esos actos deben ser condenados y castigados de manera firme y sin condiciones.
México se unió así al "Llamado de Christchurch" para eliminar el contenido en Internet que promueve actos de terrorismo y de extremismo violento.