"La UE y sus Estados miembros están unidos en exigir que todas las partes en el conflicto libio se comprometan con una tregua permanente y vuelvan al proceso político facilitado por la ONU", indica el texto.
Mogherini reiteró su rechazo a cualquier solución militar a la crisis libia.
La UE llamó a las partes en conflicto a proteger a los civiles, incluidos los migrantes y refugiados, asegurar el suministro de ayuda humanitaria y servicios básicos a los afectados y responsabilizar a los autores de ataques indiscriminados contra las zonas residenciales densamente pobladas.
Además, el bloque comunitario condenó los ataques contra los empleados humanitarios y médicos, así como contra los hospitales y la infraestructura nacional.
Destacó también que el conflicto actual desestabiliza la situación en toda la región porque facilita el desarrollo del terrorismo.
En este contexto la jefa de la diplomacia europea subrayó la importancia de que todas las partes en conflicto se separen de los terroristas, tanto de palabra como de obra.
Libia continúa sumida en una crisis desde que el derrocamiento de su líder histórico, Muamar Gadafi, en 2011, derivó en violentos enfrentamientos entre facciones rivales, la aparición de grupos yihadistas y de mafias que se dedican al tráfico de migrantes irregulares de África a Europa.
A principios de abril pasado, Libia entró en una nueva espiral de violencia después de que Haftar ordenara una ofensiva contra Trípoli para "liberarla de terroristas".
Las fuerzas leales al Gobierno de unidad nacional respondieron con la operación Volcán de Ira dirigida contra las tropas de Haftar.