En un principio, el Ministerio de Turismo esrilanqués planeaba aplicar la medida a 39 naciones, en particular, Australia, Canadá, EEUU, Japón y buena parte de los miembros de la Unión Europea, pero luego extendió el proyecto piloto a un total de 46 países, entre ellos mercados tan importantes como China, la India y Rusia.
Además de incentivar el flujo turístico durante la temporada baja, de mayo a octubre, el programa busca ayudar a un sector castigado por cancelaciones en masa tras la reciente cadena de atentados
El 21 de abril pasado, el Domingo de Resurrección, ocho explosiones ocurrieron en varias zonas de Sri Lanka, provocando unos 250 muertos y 500 heridos.
Detrás de los ataques, según las autoridades, está el grupo Jamaat al-Tawhid al-Watania, supuestamente vinculado con ISIS (autodenominado Estado Islámico, prohibido en Rusia y otros países).