Autoridades ecuatorianas "confirmaron que los especialistas hallaron información que ratificaría la presunción del Gobierno de Ecuador de que Bini (...) habría hackeado información de varios gobiernos, incluido el de Ecuador", dijo la cadena CNN.
Bini, un programador y ciberactivista de 36 años, fue detenido por la policía ecuatoriana el 11 de abril en el aeropuerto de Quito, cuando se aprestaba a viajar a Japón.
La ministra del Interior, Maria Paula Romo aseguró que Bini era un "miembro clave" del portal WikiLeaks y que había "colaborado con intentos de desestabilización en contra del Gobierno" de Lenín Moreno.
El 2 de mayo la justicia ratificó su prisión preventiva por el "evidente peligro" que su libertad podía entrañar para la investigación, por su dominio de medios electrónicos.
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El 29 de mayo la justicia ecuatoriana negó la libertad bajo fianza a Bini.
Para Soria, el envío de los aparatos electrónicos a EEUU generó alarma porque podían manipularse las pruebas.
El 22 de mayo la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidieron al Gobierno de Ecuador que explique las razones por las que fue detenido Bini.
"El señor Bini ha mantenido una amistad personal con Assange, sin embargo no está afiliado profesionalmente con él ni con WikiLeaks", dijeron la ONU y la CIDH en un comunicado.
Assange fue despojado el 11 de abril del asilo que le proporcionaba Ecuador en su embajada en el Reino Unido y detenido por la policía británica por burlar una orden de arresto en 2012.
Su detención se hizo también luego de que EEUU presentó una solicitud de extradición para juzgar al ciberactivista australiano por la presunta comisión de delitos de intrusión informática y espionaje.