"Las acusaciones que siguen formulándose contra Rusia por injerencia en los asuntos electorales de EEUU, las seguimos considerando insostenibles, ya que incluso esa breve información indicada en el resumen [del informe] no tiene ningún fundamento", dijo a la prensa.
El portavoz presidencial explicó que Rusia no ha visto el propio informe, sino solo su resumen, "que no dice nada nuevo salvo el reconocimiento de que no hubo ninguna colusión".
"Nuestro país no ha interferido en los asuntos internos de otros países, incluido EEUU, y tampoco en los procesos electorales", señaló Peskov, al subrayar que Rusia también se opone rotundamente a la injerencia de otros países en sus asuntos internos.
El 22 de marzo Mueller había terminado su investigación y presentó su informe final.
Robert Mueller concluyó que ni la campaña de Trump ni ninguna de las personas relacionadas con ella "conspiraron o coordinaron con Rusia en sus esfuerzos por influir en las elecciones presidenciales de 2016", según una carta que el fiscal general Bill Barr envió al Congreso el 24 de marzo.
El fiscal general también informó que el informe de Mueller no aporta suficientes pruebas para concluir que Trump "violara la ley al obstruir la justicia".