El miércoles, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, dijo en su discurso del estado de la nación ante el Parlamento federal que el misil hipersónico Tsirkon, diseñado para emplazamiento en buques de superficie y submarinos, tendría una velocidad de 9 Mach (11.000 km/h) y un alcance de más de 1.000 kilómetros.
El contraalmirante añadió que sería posible detectar los misiles en vuelo, pero en ningún caso interceptarlos.
"Un sistema hipersónico como Tsirkon puede perforar cualquier defensa antiaérea y antimisiles. No hay protección frente a él", subrayó.
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Respecto a los sistemas de lanzamiento vertical Mark 41 (Mk 41 VLS) con misiles de crucero Tomahawk que EEUU emplazó en Rumanía y va a desplegar también en Polonia, el contraalmirante opinó que dos o tres buques de superficie y submarinos rusos en el Atlántico Oeste, y otros tantos en el Pacífico Este, con unos 40 misiles Zircón a bordo, serían suficientes para destruir los centros de control correspondientes en América del Norte.
"No quepan dudas de que la destrucción de dichos centros está garantizada", afirmó.