"Posiblemente, se han fijado en la declaración hecha a principios de septiembre por [la jefa de la diplomacia europea] Federica Mogherini, quien dijo literalmente lo siguiente: "Los Balcanes son un territorio de la UE, nadie más debe meterse aquí", dijo el canciller ruso.
Además Lavrov destacó que Rusia no intenta incidir en los resultados del futuro referéndum que tiene previsto celebrar Macedonia respecto a la denominación del país.
"Habrá un referéndum, y les invito a mirar en los medios, redes sociales, internet, qué dice Rusia al respecto: no decimos nada que pueda interpretarse como propaganda de algún desenlace concreto", dijo.
Los dos países llevan ya más de 25 años sumidos en el conflicto sobre el nombre de la antigua república yugoslava, que coincide con el nombre de una región griega.
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El cambio del nombre debe permitir a Macedonia entrar en la OTAN y la UE.
Sanciones antirrusas
El presidente de la República Srpska, Milorad Dodik, aseguró que no permitirá que Bosnia y Herzegovina se una a las sanciones antirrusas.
Dodik destacó que las relaciones entre Rusia y la República Srpska se desarrollan favorablemente en todos los ámbitos, y reveló que los dos estados cooperarán en la investigación de nuevos yacimientos de petróleo y en la extracción de crudo.
"Nosotros hemos recordado que fue precisamente la República Srpska la que no permitió que Bosnia y Herzegovina se sumara a las sanciones contra Rusia, y planeamos seguir defendiendo esa postura", dijo el mandatario.
El líder rechazó todas las acusaciones de una supuesta injerencia rusa, resaltó que Rusia es un país "amigo" y agradeció la defensa realizada por Moscú del Acuerdo de Dayton.
El 21 de noviembre de 1995 se firmaron los Acuerdos de Dayton que proclamaron la Federación de Bosnia Herzegovina, la República Srpska y el distrito especial de Brcko y establecieron la representación de las tres naciones en una Presidencia con tres miembros, que sustituye al presidente y a los órganos de poder habituales.