El ministro de Cultura, Sérgio Sá Leitão anunció que van "a impulsar un movimiento internacional de búsqueda de colecciones para que al menos parte de este material sea recuperado", aseguró en declaraciones al medio local O Globo.
El Museo Nacional de Río era el más antiguo de Brasil y albergaba más de 20 millones de objetos: desde minerales a momias egipcias, pasando por objetos indígenas, arte africana y parte del patrimonio de la familia real portuguesa, que ocupó el palacio antes de que se convirtiera en museo.
Aun no hay detalles exactos sobre la magnitud de lo que se ha perdido, pero los responsables del museo y el propio ministro ya han asumido que el daño es irreparable.
El responsable de la cartera de Cultura avanzó que el Gobierno ya ha destinado diez millones de reales (2,4 millones de dólares) de emergencia a la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), que administraba el edificio, para que se pueda hacer la reconstrucción más urgente.
Previamente, el presidente Michel Temer anunció un plan junto a los principales bancos y empresas del país para reconstruir el edificio.